I would give all I am to you

Sabes que no soy la persona mas religiosa del mundo, pero si hay algo por lo que siempre agradezco es por haberte conocido. Miro para atrás y realmente no sé qué haría sin vos. No puedo creer que ya hayan pasado dos años desde la primera vez que hablamos. Dos años desde que te fuiste convirtiendo rapidamente en la persona que más quiero en este mundo, en mi confidente, a quien le cuento todo, en mi psicóloga a veces, la persona con la que más cosas invento, con la que más me río. Dos años ya desde que te convertiste en mi mejor amiga. Siento que en este mundo hay alguien quien me entiende, que se rie de las mismas cosas que yo, que le gustan las mismas cosas, pero que a la vez es muy distinta. Pero a pesar de todas esas diferencias, para mi sos mi hermana de otra madre con otra nacionalidad. Y soy feliz cuando hablo con vos, me olvido del mundo, porque si estamos juntas todo marcha bien. Y por todos los momentos que compartimos, quiero que estés siempre conmigo, porque ya no me imagino mi vida sin vos, porque quiero que compartamos cosas por siempre, quiero que estemos cerca, ser la padrina de tus quince hijos, reir juntas y charlar por horas, ver a Celine miles de veces, seguir planeando viajes, soñando, quiero que lleguemos a viejitas siendo amigas y que nos sentemos con nuestros glamourosos bastones juntas. Quiero que seas mi mejor amiga por siempre. Quiero que seas feliz, daría todo porque así sea; todo lo que tengo y lo que soy, con tal de ver esa sonrisita en tu rostro. Prometo, solemnemente, por nuestra hija, que voy a hacer todo porque así sea, que voy a ser la mejor amiga que puedas esperar tener y que voy a quererte siempre, pase lo que pase. No te olvides que podés confiar en mi, que te quiero tal como sos y que nada ni nadie cambiaría eso. Nunca te olvides que en Argentina hay un corazoncito que te quiere muchísimo, más que a nadie, de aquí a México caminando, ida y vuelta quinientos once mil quinientas noventa y cinco veces.